viernes, septiembre 26, 2003

No Delfos, No Creta...No woman, no cry

Pues ni tan grandiosa ni tan imponente y llena de historia como yo la esperaba. La acrópolis resulto mas bien algo decepcionante. De momento esta llena de maquinas que se ocupa de la reconstrucción del templo y entre las través y andamios y maquinaria, lo que se puede ver esta como de chale. Si, insisto y deletreo
C - H - A L - E. .... y para esto pase 20 hrs. en el ferry y 4 mas en un tren todo cucho ??? -...... una vez mas ... chale.

El museo nacional esta cerrado esperando las olimpiadas del 2004 y el museo de sitio de la acrópolis aclara que tiene solo como 5 piezas por que todo lo agandallo un embajador británico.
Pero siempre hay algo que salva el día, y los nativos de Atenas fueron el otro ( si no es que el único ) atractivo turístico en sustitución de los vestigios arqueológicos. Yo pensaba que los meros papas fritas en cuanto a belleza eran los florentinos, pero los atenienses están igual de bien que los primeros, así que ahora estoy en la encrucijada de decidir cual es mejor. Posiblemente sea la combinación de los dos países: un griego-italiano, algo así como toda la belleza sin tanta nariz.

Algo que note fue que aquí como en ninguna otra ciudad de las que he visitado, hay mucha gente vieja, y es la costumbre de los ancianos ( de todos ) meterse en lo que no les importa. Están bien al pendiente de cualquiera de sus movimientos y hay un dejo de desprecio en su mirada. Es igual en hombres y mujeres, aunque en las mujeres se nota más. Hagan de cuenta esas viejitas de iglesia que traen el rosario en la mano pero se están recortando a toda la gente alrededor.

O posiblemente solo se trate de que el tiempo, la gravedad inmisericorde y las arrugas aquello que en su juventud fuera un rostro elegante y perfectamente bien perfilado se convirtió en un rostro que de tan serio parece inquisidor. Y sus narizotas tampoco ayudan, algunas de ellas parecen estar a segundos de mutar en papagayos.

La ciudad en mas bien un rancho, grande, pero rancho al fin. Lo único lindo son las nuevas instalaciones del metro pero de ahí en fuera, es muy fea. Sus trenes son como del año 1825 e incómodos como la fregada. Y en las estaciones, a un año de las olimpiadas no había un solo mapa en ingles, e intentar leerlos al menos a mi no me sirvió de mucho, porque lo único que entendía era el símbolo de pi, el de sumatoria, la epsilon, alfa, gamma, fi, y todos los demás utilizados en matemáticas, pero que en este contexto no tenia ni idea de que significaban.

Así que lo que me llevo de bueno de Grecia son una bonita estampa de sus nativos y la comida, que aquí fue donde tuve mi primer alimento decente de todo el viaje ( nada con pasta ), gracias a Dios aquí conocen la cebolla y los pimientos. Me comí una ensalada deliciosa con queso y vinagreta , una carne preparada con especias riquísima , esto acompañado de ouzo, la bebida local, todo servido en grandes proporciones y muy, muy barato. Aunque sigo sin encontrar la papaya que mi estomago reclama con desesperación.
Por las distancias que había que recorrer y sobre todo por el tiempo, decidí no ir a Delfos ni a Creta. De cualquier forma no quería preguntar nada al oráculo ( que tal que me responde ) y si bien me quede con ganas de echarme a remojar en alguna de las playas de las n +1 islas que hay, ya tengo planeado para el 2005 hacer un tour por las mismas y a ver si mientras durante ese tiempo, me surge alguna pregunta que valga la pena hacer.

Y ahora me voy, Venecia me llama...................

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