martes, noviembre 19, 2002

Dios agarro sus crayolas y se puso a hacer rayones en el cielo

Que razón tenía Jaime Sabines al decir que Dios ha puesto orden en las galaxias y distribuye bien el tránsito en el camino de las hormigas. Ojalá no se la hayan perdido, y si se la perdieron ... se las cuento.
Vieron la lluvia de estrellas ??.
La persona que me informo dice que la siguiente similar en intensidad es en el 2098, ayer en la noche en el noticiario la pronosticaron para el 2009 y hoy en la mañana para el 2023. Sea cual fuere el caso, para que esperar tanto tiempo.
Me levante apenas sonó el despertador a las 4:00 am , cosa que no hago ni por favor cuando se trata de ir al trabajo,agarre mi abrigo y tratando de hacer el menor ruido posible (lo cual es muy difícil si consideramos que mis perros se vuelven locos cuando me ven .. me quieren ) subí al techo demi casa.
Con una luna llena que parecía de octubre, panorama despejado y un frío de la fregada ( creo que estábamos a 4 grados ) me senté cómodamente en la escalera levante la cabeza al cielo y espere. Menos mal que Otho es un perro fiel, gordito y peludo que procura seguirme a donde voy, se hecho junto a mi y mitigo un poco el frío (claro que hoy con la luz del día descubrí el estado en el que quedo mi abrigo lleno de pelos... pero bueno ).
5 minutos después de barrer el cielo hasta donde la pared de la casa de enfrente y los tendederos me lo permitían y sin ningún éxito, estaba por bajarme y entonces la vi: un discreto rayón plateado en el negro justo al lado de venus.... y luego otro.. y otro y se dejaron venir y que les digo .. fue muy chido.
Decidí regresar a mi cama cuando escuche a la vecina gritando, me metí a la cama y aunque tarde un rato en lograrlo, finalmente me dormí. Por supuesto llegue más tarde que de costumbre a la oficina,pero que importa, cuando la negociación era decidir entre observar el espectáculo a lo 24 años o esperar a que tuviera 31 o 45 o 120 según los diferentes pronósticos de la siguiente lluvia de estrellas, creo haber hecho una buena elección.
María suspiró también, pero guardó silencio.
Dios mío -dijo en su fuero interno- no me escuches;
el mundo está bien hecho aun cuando yo suspire.
Está bien hecho y solo me atemoriza la soledad.
Y este visitante me agrada mucho.
De "La última tentación" de Nikos Kazantzakis

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