Bien dice el dicho .... nunca hay que decir de esta agua no beberé, porque luego ahi esta uno llenando el pepsilindro.
Hubo malos entendidos, una explicación super chafa de cual sería mi futuro profesional y una oferta económica de inicio bastánte fea. Así, que no fuí a la entrevista.
Y luego me buscarón hasta que me encontraron, y reagende la cita solo por no tener mal karma de entrevistas de trabajo. Todavía mi mamá me dijo cuando salí de la casa : !Mucha Suerte ! a lo que yo respondí: -No, aquí no me quiero quedar, solo voy por no ser más informal.
Y 4 horas después cuando regresé a mi casa ya tenía trabajo.
No tengo el tipo de contrato al que estoy acostumbrada, no puedo sacar mi vaca vine a caer en blandito con mis compañeros de trabajo, uno de ellos ya me conoce de la vocacional y al resto solo les tomo un rato para llamarme "rebelde", yo, por supuesto, me siento halagada.
A cambio de las prestaciones convencionales logre una mejora considerable en otro aspecto que en el momento que se me acabe el veinte aquí, me va a permitir cotizarme desde otro escalón, y además, luego de 4 años de perderme los cambios de estación, tengo un ventanal.
Las instalaciones del lugar son preciosas, hay ardillas ,una biblioteca con documentos históricos según me cuentan,un pozo,un patio con naranjos que cada quie atravieso me recuerda a Sevilla, una iglesia colonial atrás y tengo la Gandhi al lado. Por supuesto que me puedo poner exigente, pero por lo mientras, es un excelente "tenme acá".
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